En tiempos de altos movimientos migratorios en el mundo, pero en especial desde América Latina, quienes dejan su país de origen para abrirse camino en otra geografía se enfrentan a un sinfín de barreras, siendo una de ellas la degradación profesional.
Singa, una ONG ubicada en Barcelona y presente en siete países de la Unión Europea, estima que los inmigrantes pueden tardar hasta 10 años para recuperar el estatus profesional que tenían en su país de origen.
Bloomberg Línea presenta la historia de Claudia Terán, de 45 años, quien llegó a Barcelona (España) en enero de 2017 en busca de un mejor futuro dejando su natal Cochabamba, en Bolivia. Tras pasar por diferentes trabajos, decidió emprender en la ciudad catalana asumiendo un riesgo clave