La derrota de Bolivia en la Guerra del Pacífico (1879-1884) significó un punto de inflexión para el país andino con la pérdida de la salida al mar, lo que ha marcado su historia económica y social hasta ahora, sin descontar las dificultades internas, arraigadas en la estructura económica y política del país.
Tras el fin de la Guerra del Pacífico, se fijó una nueva delimitación territorial en el tratado firmado en 1904, que terminó con la pérdida de 120.000 kilómetros cuadrados de territorio y 400 kilómetros de costa boliviana.
Desde el Instituto de Finanzas Internacionales explican que Bolivia pierde entre el 1,5% y el 3,4% de su PIB cada año debido al sobrecosto logístico de no contar con acceso soberano al mar, porcentajes que se traducen en pérdidas millonarias