De acuerdo con Bloomberg News, los precios al consumo en EE.UU. siguieron subiendo en noviembre a un ritmo que alimenta la preocupación por el estancamiento de los avances en la contención de la inflación.
El llamado índice de precios al consumo subyacente -que excluye los costos de alimentación y energía- aumentó un 0,3% por cuarto mes consecutivo, según mostraron el miércoles las cifras de la Oficina de Estadísticas Laborales. Desde hace un año, ha subido un 3,3%.
Los operadores siguieron apostando a un recorte de las tasas de interés de la Reserva Federal la próxima semana después de que las cifras resultaran en gran medida como se esperaban.