El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha sostenido que el informe del Centro Carter, especializado en la observación de elecciones y que concluyó este miércoles que los comicios celebrados este fin de semana “no pueden considerarse democráticas”, ya estaba escrito “desde hace un mes”, mientras que ha alegado que el organismo está controlado por el Gobierno estadounidense. “El Centro Carter tiene dos historias, una con el presidente Jimmy Carter y ahora con esta gente que la lleva que son del Departamento de Estado y trabajan en la USAID (Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional). Todos los que vinieron del Centro Carter traían el informe ya escrito (…) desde hace un mes”, ha dicho en una rueda de prensa. La organización indicó que las elecciones carecen de la integridad electoral suficiente e incumplen los estándares internacionales, agregando que no ha podido verificar los resultados declarados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que dan la victoria a Maduro. Además, el hecho de que las autoridades electorales del país no hayan anunciado resultados desglosados por mesa electoral, señalan, constituye “una grave violación de los principios electorales”. Maduro ha cuestionado “cuántos comunicados sacaron” los “Gobiernos del mundo”, la Unión Europea y el Centro Carter cuando el expresidente estadounidense Donald Trump denunció fraude en las elecciones de 2020, cuando Joe Biden llegó al poder. “¿Cuántos pidieron que se revisaran todas las mesas de votación en Estados Unidos? ¿El Gobierno de Londres? ¿El Alto Comisionado de DDHH? Y Trump se quedó con su grito de fraude”, ha manifestado. Por otro lado, ha aseverado que el Gobierno venezolano negoció “de buena fe” con Washington, si bien esta ha “participado” en los recientes planes para desestabilizar el país. No obstante, ha afirmado que retomaría el diálogo en el caso de que “dejen de amenazar y respeten la soberanía de Venezuela”, según ha recogido el diario ‘Primicia’. “Estados Unidos no cumplió nada, son unos mentirosos y farsantes. Casi el 80 por ciento de los migrantes que aceptamos en aviones desde Estados Unidos vienen con planes de qué atacar, dónde atacar y a quiénes atacar. Y vienen con plata”, ha manifestado. Además, ha reiterado que existe la intención de la oposición de “asaltar” el poder” mientras que “quieren sanciones” y “una guerra civil”. El dirigente ha indicado que el país no caerá en las manos del fascismo no de las potencias extranjeras. “Está bien que yo no les guste, ni les haya gustado (Hugo) Chávez, ¿pero por qué quieren meter al país en guerra?”, ha cuestionado. También ha culpado a la líder opositora, María Corina Machado, y al candidato presidencial, Edmundo González, de estar detrás de este plan. También ha asegurado que el líder del Tren de Aragua, Héctor Rusthenford, alias ‘Niño Guerrero’, está “al sur de Caracas” dirigiendo operaciones y ha añadido que estaría tratando de huir de nuevo hacia Colombia.