Los problemas de liquidez y la escasez de dólares del banco central boliviano tienen que ver con su modelo económico, que debe revisarse, lo explicó en una entrevista a Blomberg Línea la presidenta del directorio del Banco FIE, Ximena Behoteguy, que ha llevado a los banqueros del país a realizar una “gestión de relojeros, continuó la funcionaria.
A la vez, el analista financiero internacional boliviano Jaime Dunn, explicó igualmente a Bloomberg línea que “La causa principal por la cual faltan los dólares en Bolivia, es por el déficit fiscal que se tiene en los últimos 10 u 11 años, evidentemente; exceso de gasto público”. El exoperador de la Bolsa de Nueva York manifestó que la causa principal está en el modelo económico, social, comunitario y productivo que promueve el Gobierno boliviano, que está más orientado al gasto público y al alto consumo, dejando de lado la inversión privada y la exportación.
Sin embargo, el ministro de economía y finanzas públicas Marcelo Montenegro explicaba en enero 2024 que la falta de dólares es temporal y tienen que ver con la puesta en marcha de plantas industriales y el retorno del programa de sustitución de importaciones aplicado en el país altiplánico.
Por su lado, Deysi Mamani Tola, economista boliviana, desde marzo 2023 en Bitácora económica explicaba que es un error considerar que en Bolivia existe elevado déficit fiscal y endeudamiento público que lleva a la deuda más alta de su historia porque en el 2022 el déficit finalizó en 7,2% del PBI menor en 2,1% al del 2021 que cerró en 9,3% e incluso 5,5 puntos porcentuales menos que el déficit fiscal del 2020 que se encontraba en 12,7%.
A la vez, en la edición 21 del periódico mensual, Mamani Tola hacía referencia al crecimiento de los ingresos fiscales a una tasa del 18% gracias al crecimiento de los ingresos por ventas de las empresas públicas en 20% y de los ingresos tributarios en 15% por un mejor movimiento de la demanda interna y externa vs el 10,8% del gasto público orientado sobre todo a subsidios y subvenciones que han ayudado a mantener estables los precios de los combustibles y otros productos.
La reducción del déficit fiscal y de la deuda pública al encontrarse por debajo de umbrales de rango internacional, explicaba representan el camino correcto en la reconstrucción boliviana.
Bolivia, busca mejorar su sector productivo al desarrollar plantas industriales como la de carbonato de litio, la siderúrgica de Mutún, la de biodiésel que dentro del modelo de sustitución de importaciones ayudará a la vez al sector de la construcción y otros complejos industriales que generarán un enorme impacto en la economía boliviana y en la sociedad en general.
Fuente: Bloomberg, MEFP Bolivia
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