En el Día Mundial de los Océanos
Carlo, armador pesquero de Mollendo, Arequipa, nos inspira su amor por el mar
Los océanos cumplen un rol importante en la salud de la humanidad. Proveen la mitad del oxígeno que respiramos y proporcionan alimentos y medios de vida para más de mil millones de personas. También albergan una maravillosa variedad de especies silvestres, desde el pequeño plancton hasta la criatura más grande que ha existido: la ballena azul.
A pesar de los muchos beneficios que nos brindan existen amenazas que atentan contra su bienestar como la contaminación por plásticos, los derrames de petróleo y los agroquímicos. Amenazas que afectan la naturaleza, contaminan las cadenas productivas y contribuyen al cambio climático.
Esto causa que los océanos sean cada vez más cálidos y ácidos, lo que conlleva a la pérdida de arrecifes de coral, las regiones polares y la rica variedad de especies que sostiene nuestro mar peruano. Por eso, para recordar su importancia y reflexionar sobre el impacto que causamos en ellos, hoy celebramos el Día Mundial de los Océanos.
En este contexto, resaltamos la labor no solo de los pescadores, sino también de los armadores pesqueros, quiénes mantienen una estrecha relación con los océanos y reconocen su gran valor. A través del testimonio de Carlo Navarrete, un armador pesquero de Mollendo, Arequipa, conoceremos su entrega que al igual que muchos pescadores, se han comprometido a conservar esta gran riqueza.
“Se puede pescar, sin depredar. Así tendremos siempre recurso marino que disfrutar. Para esto, debemos impulsar actividades como la legalización de los pescadores e incentivar las buenas prácticas pesqueras. Si el mar peruano no fuese tan rico y productivo, así como lo explotamos ahora, ya no tendríamos nada.”, indicó Carlo Navarrete. Él ha impulsado la formalización de más de 100 pescadores artesanales en su comunidad y brinda un precio justo al producto extraído sosteniblemente. Esto quiere decir, que los buzos y pescadores asociados a él cumplen con las vedas, tallas mínimas y la trazabilidad del recurso y a cambio reciben un ingreso justo.
Además, Carlo Navarrete busca que el siguiente eslabón de la cadena productiva esté igual de comprometida que él, por lo que solo vende a negocios que acepten la pesca del día y que no exijan a los pescadores cuotas de producto que promuevan la sobre explotación de las especies. Para lograr océanos sanos es necesario que todos apuesten por la sostenibilidad, desde el pescador hasta el consumidor final.
Bajo esta premisa, Carlo genera mayor valor para su producto y la comunidad promoviendo una empaquetadora al vacío que utiliza empaques biodegradables. Para lograrlo y formar su plan de negocio se inscribió al programa formativo promovido por WWF e Intelfin “Pesca Emprende”. Él junto a 21 armadores de toda la costa peruana han aprendido a desarrollar ideas de negocios que mejoren la economía de la costa pesquera, bajo un enfoque de desarrollo sostenible.
“Fortalecer las capacidades de armadores pesqueros artesanales -en algunas ocasiones son también pescadores- que buscan la salud de los océanos sienta un precedente para abordar los desafíos de la gestión pesquera. Gracias a su esfuerzo, dedicación y ganas de salir adelante, los armadores y/o pescadores han podido aprender y desarrollar herramientas para potenciar sus emprendimientos, tomando en cuenta los componentes económicos, sociales y ambientales.” indicó Evelyn Luna-Victoria, Gerente Senior del Programa Marino de WWF-Perú.
En el Día Mundial de los Océanos hacemos un llamado para buscar soluciones que disminuyan las amenazas que enfrentan los océanos. Es necesario impulsar más iniciativas como “Pesca Emprende” donde los armadores, pescadores, la sociedad civil, el sector privado y el gobierno unan esfuerzos para mantener saludable uno de los mares más productivos del mundo, el mar peruano. Una sociedad más comprometida generará mayor demanda de productos sostenibles y protegerá nuestro mar.
