Guyana fue la economía de más rápido crecimiento del mundo en 2022 y el año pasado su PIB aumentó 33%, principalmente por cuenta del petróleo, lo que ha motivado al 40% de los expatriados que buscaron oportunidades laborales en el extranjero a regresar, según un informe de Bloomberg.
Los analistas creen que las iniciativas empresariales de los expatriados, armados con capital, habilidades y conocimientos locales, desempeñarán un papel clave para que el nuevo país petrolero se convierta en una economía diversificada y no caiga víctima de la maldición de los recursos, según la cual los ingresos procedentes de las materias primas empobrecen y corrompen.
El presidente de Guyana, Irfaan Ali, ha dicho que planea utilizar los nuevos recursos para crear empleo y diversificar la economía. Uno de los sectores que más se han acelerado es el de la construcción. Solo este año se esperan ingresos petroleros por US$2.400 millones (incremento del 50%) y el país va camino de bombear más crudo por persona que Arabia Saudí o Kuwait en 2027.
Fuente: Bloomberg
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