Latinoamérica: La sociedad civil pide a los líderes mundiales que jueguen el partido de su vida por el desarrollo sostenible
En la víspera de la Semana de Alto Nivel de la Asamblea General, las asociaciones de la sociedad civil se reúnen para analizar los progresos de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible y destacar los principales retos en relación con los derechos humanos, el medioambiente, la igualdad de género y la colaboración intergeneracional. Diversas organizaciones de Latinoamérica piden más acción e inclusión.
Este 17 y 18 de septiembre tiene lugar la Asamblea Popular Mundial, un espacio inclusivo que reúne a decenas de organizaciones de la sociedad civil de todo el mundo con el objetivo de acelerar la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y elaborar una declaración de demandas a la Asamblea General de las Naciones Unidas.
La Asamblea Popular contrasta y se complementa con la Cumbre de los Objetivos de Desarrollo sostenible que se celebra este lunes 18 de septiembre frente a la sede de las Naciones Unidas y que ha reunido a los más destacados líderes mundiales.
Durante la primera jornada de reuniones se abordaron distintos temas, como la justicia social, la reducción del espacio cívico y de los derechos humanos, los derechos de los pueblos indígenas y las reformas necesarias de la arquitectura financiera para alcanzar la justicia económica.
Otras sesiones se enfocaron en la colaboración intergeneracional para acelerar la consecución de los Objetivos, la reducción de las desigualdades y los vínculos de retrocesos que convergen en distintos ámbitos como el cambio climático, la desigualdad de género, la migración y la democracia.
Latinoamérica dijo presente
Distintas activistas participaron en las sesiones y alzaron su voz para abogar por la justicia climática, la protección de los defensores de medioambiente, la importancia de la participación juvenil en la toma de decisiones, la igualdad de género y el fortalecimiento de las instituciones y de la democracia, entre otras causas.
La fundadora y directora ejecutiva de la Organización The Millennials Movement, Rosario Diaz Garavito, enfatizó que los derechos humanos no están separados de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. “Si no los protegemos, no vamos a alcanzar nada. En este momento hay narrativas que amenazan los derechos humanos; lo vemos en distintas partes del mundo: hay censura, hay mujeres y niñas a las que se les prohíbe ir a la escuela. Tenemos que alzar nuestra voz”.
Diaz Garavito instó a los participantes a abogar en distintos niveles, local, nacional e internacional, para que los derechos humanos sean incluidos en todas las decisiones que se tomen. Hizo referencia al Acuerdo de Escazú, explicando que es el primero en el mundo que se enfoca en la protección de defensores del medioambiente y de los derechos humanos. “Luchen por algo así en sus regiones, porque los jóvenes que van a manifestarse se están metiendo en problemas por todos nosotros y necesitamos proteger sus derechos”, añadió.
En relación con los progresos realizados, su posición es clara: No estamos avanzando. “Estamos en la revisión de medio tiempo de la Agenda 2030 y solo hemos alcanzado un 15% de los objetivos de una agenda que se suponía era la más ambiciosa, que se enfocaba en las personas y en el planeta”, declaró.
En una conversación con Noticias ONU, Diaz Garavito aseguró que esta revisión de medio tiempo de la Agenda es una de las últimas oportunidades que se tienen para proteger a la humanidad de los desafíos que tendrán lugar en las próximas décadas. “Espero que los países que se han ´puesto la camiseta´ de los Objetivos de Desarrollo Sostenible empiecen a jugar el partido de su vida. Tienen que ganar, tienen que negociar para movilizar recursos. Necesitamos que los gobiernos se comprometan con la humanidad.”
Acción indígena
Activistas indígenas plantearon sus desafíos y demandas en una sesión enfocada en los derechos de los pueblos originarios, asegurando que solo algunas de sus peticiones habían trascendido a través de los movimientos de defensa del medioambiente.
En este sentido, una representante indígena de la Amazonía ecuatoriana, María José Andrade Cerda, destacó la importancia de crear coaliciones como el Foro Internacional de los Pueblos Indígenas sobre Cambio Climático, para hacer oír las peticiones indígenas de forma más efectiva.
En una conversación con Noticias ONU, Andrade destacó el trabajo colectivo que realizan todos los miembros de la comunidad desde que son niños. “No sé cómo le llamen en las demás culturas, en los demás pueblos, pero yo lo llamo minga”.
En su comunidad, minga significa tener una reunión para ayudar a un objetivo en específico. “Desde niña participas en esos tipos de actividades para la comunidad. Cuando vas creciendo, tus responsabilidades también van cambiando. Por lo tanto, siempre estás en ese trabajo comunitario. Esa es la esencia de nosotros, los pueblos indígenas”, añadió.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, los progresos no son suficientes. Un representante de Guatemala, Carlos Chex, señaló que, según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), los pueblos originarios se encuentran entre los colectivos más vulnerables de Latinoamérica.
“El trabajo a realizar radica en hacer un llamamiento para que las políticas se enfoquen en los derechos colectivos, ya que los pueblos indígenas resultan marginados cada vez que hay toma de decisiones económicas, ambientales y de infraestructura, y a incluir los aportes que estos pueblos pueden dar con su conocimiento ancestral, mentalidad colectiva y conexión con el medioambiente”, declaró.
Todos somos líderes, sin importar la edad
Por su parte, Lani Anaya, miembro de la Organización MY World México, destacó la importancia de una participación intergeneracional que sea significativa. “Muchas veces nos llevan [a los jóvenes] como fichas para estar en la foto o dar un discurso. Pero si queremos impulsar esta Agenda, tenemos que tomar responsabilidad, todos nosotros con todas las generaciones”.
Anaya instó a los participantes a trabajar con considerar a todas las demás generaciones como socios y como personas que tienen sus propias necesidades. “No podemos imponer lo que pensamos sobre lo que otras generaciones necesitan o no; necesitamos colaborar con todas las personas. Todos somos líderes, sin importar la edad”.
Explicó que desde su Organización en México están involucrando a todos los estudiantes en las escuelas y que trabajan para involucrar a los padres y a los profesores para que sea un trabajo intergeneracional y un liderazgo compartido. “Esta agenda es para todos. Los jóvenes no son el futuro, los niños no son el futuro; son el presente”.
Por último, señaló que la riqueza tampoco está distribuida por generaciones, y que, por ejemplo, muchos jóvenes no dispongan de financiación para acudir a la Asamblea.
La Asamblea Popular Mundial continuará este 18 de septiembre con otra ronda de reuniones y una sesión plenaria final donde ofrecerán un resumen de los mensajes clave de la Asamblea.
Durante la Cumbre de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la sede de la ONU, los líderes mundiales adoptaron una declaración en la que aseguran que ahora sí actuarán para no dejar a nadie atrás.